jueves, mayo 31, 2007

Contigo no


Te describo el amanecer..?

el cielo bajó a escondidas cuando nadie lo veía,

a encontrarse con su amada la montaña,

y se quedó dormido sobre su piel aspera y con sabor a madugrada,

pero, una parte de él si despertó,

y no olvido colorearse de bostezos de pájaros y de sol que entonaban

los mas armoniosos silencios.

y amanecí junto con la claridad que poseía al cielo,

con el olor a lima del balcón desconocido

con los dedos trasnochados,

con las voz acallada de las cosas

y el aliento de un suspiro ebrio de nada,

pero contigo no,

a ti te reservé para la eternidad de mis noches,

donde el cielo baja a tientas y se auna con las montañas

y se queda dormido en al inmensidad de su piel

y en la altivez de sus brazos,

aunque me des la espalda y no menciones mi nombre

con tus sonidos y silencios si seguiré deambulando en mí,

pero contigo y con tu ausencia, no.

puedes irte, que lo que de tí me queda me basta

para dormirme en tu piel como el cielo a escondidas

te describo el amanecer...?





no te pierdas mas auroras,
no te olvides de vivir por estar viviendo...


martes, mayo 22, 2007

No te salves

Soy fan de una película que no he visto, como he amado a tientas y sin ver mas que lo que no estuvo nunca, como he aderezado con pimienta sin antes haber probado el plato,
como me he parado a cantar sin saberme la letra de la canción (21-11-2006)
o he herido sin saber porqué,
pero, el que no haya visto la película no me quita que sepa mucho de nada,
y me haga menos fan que alguien que sí la haya visto,
el haber amado a tientas no me quita haber amado de la manera mas exquisita e intensa, despues de todo, quien ama en completa claridad?
el daño que sufrió el plato no fué tal, a veces arriesgarse sin medir medidas es lo más sensato,
el haberme parado sin pensar frente a un micrófono aquel 21 me hizo, -o al menos eso pensé- el puerto seguro del alma que amo, y mas fuertes que el olimpo, a pesar del temblor de piernas y las manos sudorosas, y el haber herido me hizo consiente de mi resonante humanidad-estupidez, me hizo odiarme y sufrir casi tanto como cause sufrimiento, pero algo se aprendió...
mi punto fundamental es que creo y sé que hay cosas que se aman con solo saberlas, vivas y existentes, nada mas se necesita, hay algo mas allá de lo explicable que te une a lo desconocido, en este caso, a esta película que conozco y desconozco..pero no por mucho tiempo
(el lado oscuro del corazón , 1992 Mario Subiela), aquí les dejo uno de los tantos poemas que la voz de oliverio recitan en la película.




No te quedes inmóvil

al borde del camino

no congeles el júbilo

no quieras con desgana

no te salves ahora

ni nunca

no te salves

no te llenes de calma

no reserves del mundo

sólo un rincón tranquilo

no dejes caer los párpados

pesados como juicios

no te quedes sin labios

no te duermas sin sueño

no te pienses sin sangre

no te juzgues sin tiempo

pero si

pese a todo

no puedes evitarlo

y congelas el júbilo

y quieres con desgana

y te salvas ahora

y te llenas de calma

y reservas del mundo

sólo un rincón tranquilo

y dejas caer los párpados

pesados como juicios

y te secas sin labios

y te duermes sin sueño

y te piensas sin sangre

y te juzgas sin tiempo

y te quedas inmóvil

al borde del camino

y te salvas

entonces

no te quedes conmigo...

lunes, mayo 21, 2007

Biografia incompleta

nací en las auroras que me perdi por estar durmiendo, con bostezos curiosos que mi madre y las luces decembrinas aun recitan,
crecí en el silencio de las tardes de plancha y novelas,
entre pianos y letras obligadas,
jugando en los castillos de barro en el patio y las lagunillas absorbidas por la inocencia,
con los helados de la esquina y el olor de papá despues de las 7,
no tuve mejor amiga, ni comiquita favorita, no use cintillos ni zapatitos de charol,
amé los perros del vecino y la lluvia sobre un arbol, comiendo nísperos y mamones,
era yo la del vestido roto, la de los libros y la musica
no temí al coco, pero si a el aceite, cocinaba con la mirada lo que mamá hacia con las manos,
disfracé peluches de ahorcados en mi techo, y reí con lo absurdo de la noche,
ahora,
con tanta ausencia de frutas, gatos, lagunas y olores,
ya nadie me regaña, me cambia, me obliga a tomar siestas diurnas en las que soñaba despierta
y con los ojos cerrados,
no hay aceite hirviendo que me asuste,
no hay peluches para ahorcar,
solo la creciente madurez, y la rutina y las obligaciones
y la falta de inocencia en las tardes lluviosas,
ahora soy grande, y mas insignificante que nunca..